En un evento reciente en la ciudad de São Paulo, luego de la Revocación de la Resolución CFM 2227/2018 que reglamentaba la Telemedicina, uno de los temas discutidos fue la Teleultrasonografía, resultando en la siguiente pregunta: ¿La evaluación y el informe de la Ultrasonografía se pueden hacer a distancia?
La Normalización de la Telerradiología, que está contemplada en la Resolución CFM 2107/2014, deja claro en su Art. 6: “Se prohíbe el uso de Telerradiología para procedimientos intervencionistas en Radiología y Diagnóstico por Imagen y exámenes de ultrasonido”.
El examen ecográfico se realiza en tiempo real, siendo totalmente dependiente del examinador, ya sea por el amplio conocimiento de la anatomía o por la formación de numerosas imágenes, dependiendo del ángulo del transductor.
En el momento de la formación en Ultrasonido, era común escuchar de los preceptores: “el examen de ultrasonido corresponde a un método con el que debemos tener mucho cuidado, ya que podemos formar cualquier imagen”. ¿De dónde vino esta colocación y por qué? ¿La falta de atención por déficit en la financiación del Sistema Único de Salud (SUS) justifica la realización de procedimientos de baja calidad para falsificar la atención ideal?
¿Los interesados en esta nueva modalidad realmente se preocupan por la salud de la población, especialmente de los más desfavorecidos? ¿Es lícito defender una Medicina pobre para los más pobres? cuales son los grandes jugadores detrás de esta bandera? Un método inocuo, libre de radiaciones, de bajo coste y fácil de realizar, pero que depende de la mano del médico para su realización.
Desgraciadamente, lo que se busca hoy en día es la retirada de las manos del médico, sea asistencial o propedéutico. Inmediatamente se forma una cola de candidatos para reemplazar las manos del médico. Profesionales de la salud de las más diversas áreas quieren actuar como médicos, pero se olvidan de las responsabilidades civiles y penales que amparan estas inacciones.
Corresponde al Colegio Brasileño de Radiología y Diagnóstico por Imágenes, en su papel de defensa de la buena práctica médica, buscar, junto con el CFM, supervisar las acciones que estos perjuicios hacen a la sociedad. Es incomprensible que compañeros médicos, con una formación técnica intachable, puedan defenderse en lo que podría resultar indefendible.
La Teleultrasonografía choca con las Normas de la Telerradiología y no merece prosperar. Estén atentos: se debe prohibir el ejercicio de Ultrasonografía a distancia y reportarlo al CRM o CBR regional.
Dr. Cibeles Alves de Carvalho
Director de Defensa Profesional en CBR